Portal Oración 24x7UNA IGLESIA FUERTE TRANSFORMA LA CULTURA – DÍA 49
DESAFIO DE 100 DIAS DE ORACION – Por Mike Bickle (Devocional)
Le temo a las oraciones de John Knox más que a toda la asamblea de los ejércitos de Europa. (Mary Queen Of Scots)
ES IMPORTANTE DARSE cuenta de que la gran mayoría de las oraciones apostólicas están centradas en fortalecer la iglesia, no en los perdidos ni en la transformación de la sociedad. Esto no significa que Dios tenga sentimientos encontrados por los perdidos o por la sociedad ni que no debemos orar por estas cosas. Sin embargo, la única oración en el Nuevo Testamento que está específicamente centrada en los perdidos se encuentra en Romanos 10:1, donde Pablo suplicaba: “Hermanos, ciertamente el anhelo de mi corazón, y mi oración a Dios por Israel, es para salvación”.
¿Por qué hay un enfoque abrumador por fortalecer y revitalizar a la iglesia? Porque la estrategia principal y el plan de Dios para alcanzar a los perdidos o para impactar una ciudad es a través de la unción de su iglesia con poder, amor y sabiduría. Cuando oramos por toda la iglesia en una ciudad en particular para ser revitalizada en amor y poder, la respuesta a esas oraciones tendrá un impacto inmenso en los perdidos de esa ciudad. Inevitablemente, muchos creyentes vendrán a Jesús, y la sociedad cambiará a medida que la iglesia avanza en el poder del Espíritu Santo.
Vemos este principio en acción en la ciudad de Éfeso. ¿Cuál fue el resultado de las oraciones por la iglesia en esa ciudad? La prédica de la Palabra de Dios estaba tan poderosamente ungida que su influencia “creció poderosamente y prevaleció” en toda la ciudad (Hechos 19:20). La estrategia de Dios era levantar allí una iglesia grande, ungida, que obtuviera una gran cosecha en toda Asia. Lo que sucedió en Éfeso fue tan poderoso que todos los que vivían en Asia “escucharon la palabra del Señor” a través de Pablo y otros en esta iglesia.
Cuando los predicadores están ungidos y la iglesia tiene un avivamiento, los santos hablarán la Palabra y harán las obras del reino con gran consistencia, y una multitud de no creyentes vendrán a Jesús. Por lo tanto, hacemos bien en esforzarnos en rogar por una unción mayor del Espíritu sobre la iglesia, sabiendo que definitivamente resultará una cosecha. Ningún poder puede evitar que los perdidos vengan a Jesús en grandes cantidades cuando la iglesia está revitalizada y funcionando en unidad bajo la unción del Espíritu.
EL LLAMADO A LA ACCIÓN
Continúe orando por una unción aumentada sobre la proclamación de la Palabra, que avance con audacia y redarguya a los no creyentes sobre su necesidad de un Salvador (Juan 16:8). Si en su iglesia hay llamados al altar, interceda en silencio al momento de la decisión, pida al Padre que los atraiga por medio de su Espíritu. Y lea libros sobre avivamiento y vea lo que Dios hizo cuando la gente se unía y clamaba por un avivamiento en su generación.
PARA REFLEXIONAR
“También muchos de los que habían creído [en Éfeso] continuaban viniendo, confesando y declarando las cosas que practicaban… Así crecía poderosamente y prevalecía la palabra del Señor” (Hechos 19:18-20).
Señor, te ruego que unjas la predica de tu Palabra en mi ciudad y que revitalices a tu iglesia para que podamos hacer las obras del reino con audacia y ver manifestaciones poderosas de tu poder.
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Bendiciones en Cristo, Alberto Conti
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